El pastel o tarta de boda es el punto culminante del banquete. El sabor, la presentación o el precio son importantes a la hora de elegirlo.
1. La calidad de todos los ingredientes afecta al resultado final
Si todos o la mayoría de los ingredientes utilizados son de alta calidad, el sabor resultante va a ser incomparable.
2. El precio del pastel no depende sólo de su tamaño
La complejidad en la preparación del pastel es un factor determinante para el precio final. La complejidad puede estar en la composición de ingredientes o en la decoración final (flores, dibujos, pequeñas esculturas comestibles…).
3. El tamaño del pastel depende del número de invitados y de los ingredientes
Un pastel de chocolate requiere ser cortado en porciones pequeñas porque éste hace que el pastel sea denso. En cambio, un pastel hecho de fruta fresca y merengue u otros ingredientes ligeros, necesita unos cortes más grandes. Teniendo en cuenta esto y la cantidad de invitados, el pastelero y tú os podéis hacer una idea del tamaño de pastel que necesitas.
4. El pastelero necesita saber dónde va a ser la celebración
Esto afecta a los ingredientes y a su conservación. Si la tarta no va a poder estar refrigerada hasta el último minuto (en el caso que la boda se celebre en la playa, por ejemplo), debes informar a quien vaya a hacer la tarta para que te pueda asesorar en la elección de los ingredientes más adecuados.
5. No puedes dejar la elección para el último momento
La creación de una tarta de boda requiere un largo proceso: diseño (en su caso), elaboración, preparación de las partes pequeñas de la tarta (como flores o pequeñas piezas de chocolate), etc. Asimismo, hay muchas personas implicadas: artistas, pasteleros e incluso carpinteros para hacer la estructura que la sostiene. Una tarta puede llevar unas 30 horas de trabajo y, probablemente, la tuya no será la única que tengan que hacer ese fin de semana. No lo dejes para cuando no quede tiempo.
